Las crisis humanitarias, como la actual pandemia de COVID-19, que ha provocado una crisis sanitaria, social y económica a nivel mundial que afecta a todos y todas sin distinción, impactan de mayor manera en las personas con discapacidad (PcD) ya que son mucho más vulnerables debido a la discriminación y barreras que ya enfrentan en situaciones normales.
La pandemia está castigando a las PcD y sus familias severamente, comprometiendo su salud y bienestar. Esto se debe en gran parte a las condiciones de salud preexistentes, la imposibilidad de mantener el distanciamiento social, la falta de accesibilidad, la situación de dependencia, la información inaccesible y la falta de un enfoque de discapacidad en el diseño e implementación de las medidas de prevención y protección.
Conscientes de estas dificultades, las personas con discapacidad viven la situación con especial estrés y ansiedad, lo que las pone en mayor riesgo de aislamiento y de una mayor exclusión. Las coloca en una situación de inseguridad alimentaria y pone en riesgo su salud física, mental y emocional.
Ante esta situación La RED ha puesto en marcha varios procesos de ayuda humanitaria encaminados a paliar esta situación de vulnerabilidad.
